
Es una actividad muy lúdica destinada a la creación de un objeto decorativo manual (como se hace con las maquetas del sistema nervioso, o con las geoesferas pop-up) y con la ventaja de ofrecer un descanso mental de la actividad puramente intelectual con la creación de un objeto artesanal que fije los conocimientos adquiridos.

Los alumnos de 1º ESO acaban de realizar esta serie de maquetas como actividad casi final de trimestre y probablemente en el futuro próximo acaben de objeto decorativo (y recordatorio de la labor de aprendizaje) en sus lugares de estudio o de trabajo.
Una buena muestra más de como el arte -o la maquetación- son también una buena herramienta para aprender.